El control glucémico y los nuevos medicamentos como el Ozempic, claves para su control y la reducción del riesgo cardiovascular
La diabetes afecta a más de 153.000 personas en Euskadi, lo que representa aproximadamente el 6,75% de la población. La mayoría de estos casos corresponden a diabetes tipo 2, una enfermedad que, aunque prevenible y manejable con hábitos saludables y tratamiento adecuado, sigue en aumento. Este crecimiento supone un desafío significativo tanto para los pacientes como para el sistema de salud vasco.
Mantener niveles estables de glucosa en sangre es esencial para prevenir complicaciones asociadas a la diabetes, como enfermedades cardiovasculares, neuropatías y problemas renales. Un control glucémico adecuado no solo beneficia a las personas con diabetes, sino también a la población general, mejorando el descanso, la energía y el rendimiento físico y mental.
Nutrición y estabilidad de la glucosa
La alimentación juega un papel crucial en el mantenimiento de niveles saludables de glucosa. El consumo de hidratos de carbono complejos, presentes en cereales integrales, legumbres y vegetales, contribuye a una liberación gradual de glucosa en el torrente sanguíneo, evitando picos que pueden provocar fatiga y desajustes metabólicos. Además, ciertos nutrientes, como el cromo, han demostrado mejorar la regulación del azúcar en sangre, optimizando la absorción de glucosa y el metabolismo de los macronutrientes.
Semaglutida nueva opción terapéutica
Ozempic, cuyo principio activo es la semaglutida, se ha consolidado como una opción terapéutica clave para la diabetes tipo 2. Este medicamento pertenece a la clase de los agonistas del receptor GLP-1 y actúa de varias maneras:
- Estimula la secreción de insulina: Ayuda al páncreas a liberar insulina cuando los niveles de azúcar en sangre son elevados.
- Reduce la producción de glucosa en el hígado: Disminuye la cantidad de azúcar que el hígado libera al torrente sanguíneo.
- Retrasa el vaciado gástrico: Disminuye la velocidad con la que los alimentos salen del estómago, lo que puede contribuir a una sensación de saciedad prolongada y ayudar en la pérdida de peso.
Ozempic no solo mejora el control glucémico, sino que también han mostrado beneficios adicionales, como la reducción del riesgo cardiovascular en adultos con diabetes tipo 2 y enfermedad cardíaca conocida.
Aunque ha demostrado ser efectivo en el manejo de la diabetes tipo 2, su uso puede estar asociado con efectos secundarios. Los más comunes incluyen náuseas, vómitos, diarrea y disminución del apetito. Es fundamental que su administración se realice bajo estricta supervisión médica para minimizar riesgos como hipoglucemias o desequilibrios digestivos. La automedicación con este fármaco es peligrosa y puede generar complicaciones a largo plazo.
Wegovy: para la pérdida de peso
Wegovy es otro medicamento que contiene semaglutida, al igual que Ozempic, pero está específicamente aprobado para el control de peso en adultos con obesidad o sobrepeso y al menos una afección relacionada, como hipertensión arterial, diabetes tipo 2 o dislipidemia. Se administra una vez por semana y debe utilizarse en combinación con una dieta reducida en calorías y un aumento de la actividad física. Sus efectos sobre la regulación del apetito y la saciedad lo convierten en una opción innovadora para aquellas personas que buscan mejorar su salud metabólica y reducir los factores de riesgo asociados a la obesidad.
El control glucémico es esencial para la salud, especialmente en personas con diabetes. La combinación de hábitos saludables, una dieta equilibrada y tratamientos innovadores como Ozempic y Wegovy puede mejorar significativamente la calidad de vida y reducir el impacto de esta enfermedad en Euskadi. Es crucial enfatizar la prevención y garantizar un seguimiento médico adecuado para abordar eficazmente este desafío de salud pública.